Por L.M. Sánchez -
Lo vemos en las novelas, en
los parques y hasta en las vías públicas. Y es que el beso no es sólo cosa de
humanos, los pájaros juntan sus picos, chimpancés unen sus bocas y los elefantes
ponen sus trompas en los hocicos de sus parejas ¡Qué románticoooo!
¿Pero, qué es lo que
realmente hace que el beso sea tan famoso en la naturaleza? La respuesta es más
que simple, hormonas pues, es decir, PLACER.
Un beso así como los que te
gustan, apasionados a más no poder, provocan un efecto abrumador como una
sobredosis de anfetaminas (agente encargado de estimular el sistema nervioso). Según
un estudio del Instituto Kinsey de Sexología de Estados Unidos, en sólo un
besito participan cinco de los 12 pares de nervios craneales, que se conectan y
afectan directamente al cerebro.
Las consecuencias sí que son
las mejores debido que suben los niveles de dopamina (sustancia asociada con la
sensación de bienestar), serotonina (afecta el estado de ánimo) y por último la
más hot, la testosterona (relacionada al deseo sexual).
Sin embargo, la culpable y
muchas veces traicionera de producir esa sensación del beso, es la oxitocina, más
conocida como la droga del amor. Aunque no
lo creas, esta hormona hace que tus sentimientos afloren como nunca ¡Apego,
devoción y afecto por tu pareja!
Lo que debes saber de un beso:
Cuando chapas al firme,
agarre, amigo cariñoso, al bamba ¿Sabes cuántas bacterias intercambias por un simple
beso? Dos millones de bacterias y 4 mil microorganismos. ¡Pero no te alarmes!
También tiene su lado benéfico, pues generan neuropéptidos, elementos que
evitan las infecciones.
Ahora ya sabes en realidad
lo que genera un besito ¡Wiii!