Por Enrique Escobar de Paz
Una peruana logró captar la atención de todo un país en el 2009, debido a un logro
que nunca nadie había alcanzado en nuestro ambiguo cine local. Claudia Llosa ganó el oso de
Berlín por su película “La teta asustada”. Como si eso no fuera suficiente, un
año después logró una nominación a los premios Oscar del 2010, marcando un
precedente que hasta el momento no ha sido superado por ningún otro director peruano.
Bueno, luego
de 3 años, Claudia regresa a la “Berlinale”, pero ahora lo hace con un
cortometraje bajo el brazo. Este cortometraje forma parte del “Proyecto
Fronteras” organizado por el canal de televisión TNT, y donde seleccionaron a
distintos cineastas de latinoamericana para presentar historias en donde las
barreras sociales no te permiten cruzar ciertas fronteras.
“Loxoro”, es
el proyecto con el que nuestra compatriota intentará repetir el éxito
conseguido por su anterior trabajo. Pero, ¿qué significa “loxoro”?, esta
palabra tan extraña, es una forma de lenguaje utilizado por la comunidad gay y
transexual del Perú, único en Sudamérica, y ayuda a estos personajes a
comunicarse, o como señal de ayuda en momentos de apuros.
La historia nos
presenta la búsqueda que
realiza Makuti (Belissa Andía), una madre transgénero, de su hija también
transgénero Mía (Ariana Wésember) tras su desaparición. En su búsqueda Makuti
recorre todos los espacios en los que se desarrollaba la vida de Mía,
reflejándose en estos la cara oculta del mundo transexual de Lima, una
comunidad que se cierra en sí misma para defenderse de la marginación. En su
camino se cruzará con personajes como "La Pozo" (Pilar Gonzales) o
"El Oráculo".
El corto muestra el mundo complicado en el que se mueven estas personas. La
discriminación por parte de una sociedad que no entiende su forma de vivir, una sociedad machista donde solo existe el género femenino y masculino,
mientras que el homosexual, es objeto de burla y muchas veces de abuso. Nos
permite entenderlos, y ver lo difícil que es la vida para la mayoría de ellos,
que ven en la calle su centro de trabajo con el cual sobrevivir, así sea
vendiendo su cuerpo y arriesgándose a la homofobia que anda suelta en nuestro
país, y que se descarga con violencia.
No es raro que haya tanta expectativa con respecto a este trabajo.
Claudia, ha logrado ganarse un sitio en el cine latinoamericano, a sus 34 años,
ha conseguido elevarnos y permitirnos soñar con lo que parecía imposible. Parte
del equipo que participó en “La teta asustada” acompañan a Llosa en este
proyecto que podría significar un nuevo éxito para nuestro cine local. Dentro de
una semana sabremos cual fue el destino de “Loxoro”.
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| Escenas de ''Loxoro'' |
