La disputa que tienen muchos machos con la suegra es algo típico. Soportarla en la casa es lo último que podemos hacer, todo sea por nuestras hembras, ok no, por nuestros amores. Pero no siempre uno se lleva mal con la suegra, hay de todo, desde las más buenitas hasta las más perversas. Si te contara...

Sin embargo, un reciente estudio indica que el impacto que pueden tener las suegritas sobre sus yernos va más allá de lo que se cuentan en los chistes. Sexólogos gringos aseguran que los machos que viven bajo el mismo techo que sus madres políticas están más propensos a sufrir problemas de potencia sexual (¡¿Quéeee?!), así es, y no sólo eso, también problemas cardiovasculares. ¡Suegra me vas a generar un paro cardíaco!

La investigación de nuestros amigos del Instituto de Morfología Humana de Michigan desmintió la hipótesis de que la mayoría de problemas de salud de los machazos se debía a una mala relación con su madre. Eso es mentira, tu madre jamás te hará daño, pero sí la suegra, ok no.

Pero como los científicos son bien pero bien jodidos, creen que el cuerpo del hombre está genéticamente programado para no aguantar a la madre de la esposa. Es decir, estamos perdidos, si vives con tu suegra, no sé tío, múdate.

A este mal le han denominado ‘’síndrome de la suegra’’, que es la derivación de un conflicto inconsciente entre dos personas dominantes. Yo amo a mi suegra, es buena conmigo, sí claro, le he dicho mil veces a mi esposa que ya nos mudemos, pero estoy un poco misio, así que seguiré ahorrando para comprar un depa y llevarme a toda mi familia. Total, vivimos en la casa de mi suegra, fue el peor error. Ajá, ahora lo sabes...chau.