Diana Tran es una joven
estadounidense de 17 años con buenas calificaciones en la escuela y dos
trabajos que la ayudan a sustentar sus gastos personales. Sin embargo, poco o
nada le ha servido para impedir su arresto luego de que faltara a clases.
Después de que sus padres
se divorciaran, Diana ahora vive con la familia Hill, que la acogió y le dio
trabajo los fines de semana en el negocio familiar de organización de bodas.
Esto resulta poco para
ella, pues el resto de semana trabaja en una tintorería. También obtuvo dos
matrículas de honor este año. Como consecuencia, falta a clases con regularidad.
La joven explica que su
ausencia se debe a su cansancio que le genera tener tantas responsabilidades.
Este problema ha sido llevado ante el juez Lanny Miritary, quien consideró que
Diana merecía un castigo ejemplar: una noche en la cárcel y antecedentes
penales en su expediente.
Este caso ha
revolucionado las redes sociales. La petición de Change.org ya tiene 9 mil
firmas para que se revoque la sentencia y se ha recaudado 2 mil dólares para
Diana, que además debe pagar 100 dólares de multa.
FUENTE: BBC