Por Carlos Baudouin Cotrina
Odontólogo en Clínica Denti -K-
La Demencia Senil no es
una enfermedad específica, sino más bien un grupo de síntomas que son causados
por cambios en el funcionamiento del cerebro. Hay muchos y variados síntomas
que tienen que ver con la cognición. La cognición se refiere al acto de pensar,
percibir y aprender.
Las funciones cognitivas
que pueden verse afectadas son la toma de decisiones, juicio, memoria, orientación
espacial, el pensamiento, el razonamiento y comunicación.
La Demencia Senil afecta
básicamente a ancianos,
que la mayor parte de las veces requiere cuidados por parte de familia o
profesionales. Es especialmente habitual a partir de los 85 años. A partir de
esta edad afecta hasta un 50% de estas personas, si bien es cierto que a partir
de los 65 años la incidencia de esta enfermedad empieza a ser significativa.
El proceso de
envejecimiento conduce a un deterioro de las células cerebrales, lo que provoca
fatiga, problemas relacionados con el equilibrio y pérdida de memoria de carácter
progresivo.
Esta es una enfermedad crónica, degenerativa y se
caracteriza por disminuir la calidad de la vida del enfermo de forma notable.
Cuando la demencia senil
alcanza un grado avanzado, la persona no puede interactuar con normalidad ni
llevar a cabo actividades de manera autónoma. Por eso quienes sufren el
trastorno deben recibir atención permanente. Aunque existen muchos trastornos y
síndromes asociados o similares, lo que dificulta una definición precisa, los
especialistas concuerdan en que la demencia senil se inicia después de los 65 años de edad. La ansiedad, las ideas paranoides, el
aislamiento social, el estrés y los rasgos obsesivos pueden
ser síntomas de este tipo de demencia.
El curso de esta
enfermedad puede ser, progresivo, estático o reversible, puede ser de inicio
brusco y curso estable (enfermedad neurológica), de inicio insidioso y curso
lentamente progresivo (enfermedad degenerativa) y de inicio y curso lentos.
El deterioro del estado general es
variable:
- Leve, cuando conserva la capacidad de
independencia, con un juicio relativamente intacto y una adecuada higiene
personal,
- Moderado, cuando necesita algún grado de
supervisión
- Grave, cuando necesita supervisión
continua, con estado vegetativo.
Síntomas de la Demencia Senil
Los síntomas de la demencia senil se
manifiestan con la degeneración de las células del cerebro. La demencia puede
manifestarse en diferentes formas. Sin importar el tipo, la demencia Senil se
caracteriza por el daño a los tejidos del cerebro, lo que dificulta su
funcionamiento normal.
Algunos de los síntomas de la demencia
senil son:
- Pérdida de memoria
- Falta de sueño o insomnio
- Problemas con el equilibrio
- Desorientación
- Falta de coordinación física
- Fatiga
- Apatía
- Confusión
- Ansiedad
- Aislamiento social
- Falta de iniciativa
Los siguientes son síntomas de demencia
senil que ocurren en la etapa intermedia y grave
- Habilidades deficientes de
aprendizaje
- Falta de juicio
- Deterioro de las habilidades
cognitivas
- Inestabilidad emocional
- Aumento de la confusión
- Interrupción en los patrones de
sueño de los miembros de la familia
- Necesidad de asistencia en el
desempeño de tareas diarias
- Agresión
Algunas Recomendaciones que
pueden ser muy útiles si tiene algún familiar con este problema de Demencia
Senil
- Evitar el uso de utensilios de
cocina de aluminio, especialmente con alimentos ácidos como el tomate
porque se libera mayor cantidad de aluminio.
- Evitar el uso de medicamentos
antiácidos a base de aluminio.
- Evitar las bebidas enlatadas
porque contienen aluminio. El agua del caño.
- Aumentar las verduras y frutas,
levadura de cerveza, dieta rica y variada en legumbres, hidratos de
carbono integrales y las algas, porque son queladoras de metales pesados
(ayudan a eliminarlos)
- Llevar un horario estructurado
con los hábitos diarios ayuda a que la persona no se desoriente y adquiera
sensación de seguridad.
- Intentar ordenar las horas de
sueño, resituando la mayor parte de las horas a la noche.
- Actividades para mantener la
parte cognitiva. Ayuda, además, que la propia persona se acompañe de una
libreta que pueda llevar consigo para anotar lo que le dificulte recordar.
- Actividades y/o juegos que
estimulen la parte cognitiva y, si puede ser, con ingredientes de
diversión.
- Estimular la comunicación con
el exterior, dentro de un ambiente de confort.
- Introducir actividades al aire
libre con pequeños paseos, aire, sol y formen parte de la pauta.
- Favorecer un ambiente cálido
emocionalmente en su entorno y que pueda expresar cómo se siente y lo que
quiere.
- Procurar estimular que se
sienta protegido pero no anulado.
- No contraponerle a sus
ausencias y estimular los recursos para que se sienta seguro.
- Evitar los momentos de
agotamiento físico y psicológico.
Tener los síntomas de demencia senil no es ser un niño, es el deterioro
cognitivo de un adulto con las consecuentes crisis que puede conllevar el darse
cuenta de ello. Con el trato, hay que mantener el respeto, cariño y la dignidad
de la persona.