El Perú lo recordará por sus 'chorrigolazos'.
Roberto Palacios, conocido por todos como “el Chorri”, anunció su retiro de los estadios de fútbol después de 20 años de ininterrumpida trayectoria.

Poseedor de una gambeta capaz de destruir a la más férrea defensa, un remate de larga distancia que lo llevó a la fama por sus  “chorrigolazos” y un temple para recuperar cada balón perdido; eran las características de un 10 que lució su mejor juego en su amado Sporting Cristal y otros clubes de América.

Su primer partido a nivel profesional fue en 1991. El cuadro celeste, en ese entonces dirigido por Juan Carlos Oblitas enfrentaba a Deportivo Municipal y la expectativa por el debut del menudo volante de Cristal era lo más resaltante en aquel 21 de Octubre. Si bien no anotó, dejó una grata impresión por su atrevido y pícaro juego, generando el aplauso de su técnico al momento de ser sustituido por el ya consagrado Julio César Uribe.

Los goles vendrían en la segunda fecha ante el AELU de Pueblo Libre. Aquella vez el Chorri celebró dos conquistas en la goleada de su equipo (5-0) y en ese mismo año se consagraría campeón con Sporting Cristal.

El tricampeonato conseguido en 1994, 1995 y 1996 catapultó al éxito la carrera de Palacios que tuvo que dejar el equipo de sus amores por el Puebla de México. Empezaría entonces su travesía por el extranjero, jugando en equipos de renombre internacional como Cruzeiro de Brasil, LDU  de Quito, Deportivo Cali de Colombia, Universidad Autónoma de Guadalajara y otros equipos mexicanos.

El recordado polo 'TE AMO PERÚ'. 
Lo mejor del Chorri sin lugar a dudas se pudo apreciar en la  selección peruana de fútbol. Él mismo afirma que cada vez que se enfundaba la rojiblanca tenía ese “aliciente emocional” que percibe un jugador cuando representa los colores de su país. Los goles con la blanquirroja llegaron en su debut ante Argentina por las Eliminatorias rumbo a Estados Unidos 94.

Perú no clasificó a la cita mundialista pero encontró en Palacios a un jugador valioso. Anotó 6 goles en el torneo clasificatorio sudamericano para Francia 98 y fue la oportunidad más cercana que el cuadro entonces dirigido por Juan Carlos Oblitas percibió luego de 16 años sin asistir a un Mundial.

Luego vendrían 3 eliminatorias para el olvido, pero lo que no se borrará de la memoria de los hinchas peruanos es aquel encuentro de la selección nacional ante Paraguay por las Eliminatorias Japón Corea 2002. Aquella vez el Chorri hizo delirar a los miles de espectadores que abarrotaban el Estadio Nacional cuando un gol suyo de larga distancia venció la portería del ya retirado golero paraguayo José Luis Chilavert. El público asistente apreció como el buen 10 nacional lució por primera vez el polo que explicaba en 3 palabras lo que sentía por su selección: TE AMO PERÚ.

Con 39 años uno de los jugadores más representativos de nuestro país le dijo adiós a  lo que más le gusta hacer y los hinchas seguramente extrañarán aquellos “chorrigolazos”. Pero el reencuentro podría darse más antes de lo esperado cuando el Chorri alcance su sueño de ser técnico y vuelva a las canchas que tan bien lo acogieron.

Los 'chorrigolazos'

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